*La personalidad “Tipo A” es un concepto de la medicina que se refiere a las personas altamente activas y motivadas.

La mayoría piensa que las personas tipo A son impulsadas por una alta excitación y que las personas Tipo B son descuidadas y relajadas. Pero hay mucho más en todo esto.

Robert Frost dijo una vez: “El cerebro humano es un órgano maravilloso, empieza a trabajar una vez te levantas y no para hasta que tu llegas a la oficina”. Él ciertamente no estaba pensando en las personas “Tipo A” cuando dijo eso. Ellos irrumpen en la oficina como si estuvieran corriendo por un trofeo de oro y nunca parecen perder el entusiasmo. Es como si estuvieran impulsados por un motor que nunca se apaga.

Cada uno de nosotros tenemos nuestra propia idea de lo que se denomina “personalidad Tipo A”. ¿Pero qué es lo que el término significa y de dónde viene? Realmente comenzó en una sala de espera por dos cardiólogos. Los doctores notaron que sus sillas no se desgastaban al respaldo como ellos se esperaban. Ellos observaron que el desgaste era sólo visible en el borde frontal de los asientos y en los reposabrazos, sugiriendo que los pacientes estaban en el borde de sus asientos, dispuestos a saltar al instante en que fueran llamados.

Entonces, los cardiólogos. -Los doctores Friedman y Rosenman- quisieron descubrir si los extraños modelos de desgaste en sus sillas eran porque la gente impaciente era más propensa a ataques del corazón. Ellos encontraron que su sospecha era incorrecta. Ellos también encontraron que las personalidades tienden a inclinarse en una o dos direcciones, a las que denominaron: Tipo A y Tipo B.

type-a-personality-vs-type-b-personality

La mayoría piensa que las personas tipo A son impulsadas por una alta excitación y que las personas Tipo B son descuidadas y relajadas. Pero hay mucho más en todo esto. Los Tipo A son frecuentemente malentendidos, ya que no conocemos el tipo de mentalidad que hay detrás de su comportamiento.

Para entender completamente lo que significa ser Tipo A, es necesario ir directamente a la fuente. Así que no me escuchen a mí, más bien veamos qué es lo que las personas Tipo A tienen que decir:

1. Creemos que ganar es la única opción

Somos muy duros con nosotros mismos. Nuestro deseo de hacer todo lo mejor a menudo se transforma en el deseo de ser El Mejor. Después de todo, si alguien hace algo mejor que nosotros, entonces tenemos que no hemos estado intentando lo suficiente, ¿verdad? Esto asegura que incluso las actividades más sencillas se convierten en una competición también.

2. Vivimos y morimos por nuestras metas

Nosotros no hacemos nada «apenas porque sí.» Hay un objetivo final para todo. ¿Taza de café en la mañana? El objetivo es despertar. ¿Media hora de Pokémon Go en el almuerzo? Se trata de hacer un poco de ejercicio y capturar más pokemones que nuestro amigo del pasillo. Que el cielo ayude a cualquiera que nos ralentiza o se interponga en nuestro camino. No somos nada si no alcanzamos nuestros objetivos.

3. Siempre estamos estresados

El logro de nuestros objetivos es tan importante para nosotros que a menudo estamos estresados sobre si progresamos o no. Es la amenaza de la pérdida de tiempo o la pérdida de oportunidades que pende sobre nosotros la que nos pone en movimiento al instante.

4. Aprovechamos el tiempo al máximo

Algunas veces estamos moviendo los dedos, sin hacer nada, solo esperando que una reunión empiece. Sin embargo generalmente tratamos de hacer las tareas tan pronto sea posible y al punto de que a veces hacemos más de lo que la tarea misma demanda. En nuestro afán de hacer que las cosas sucedan y cumplir con nuestras metas, también a veces generamos tiempo muerto en el que no se hace nada, así como tiempo muerto para otras personas.

5. Queremos que vayas al punto

No nos gustan los preámbulos largos. Si tienes preguntas que hacer, simplemente hazlas. No desperdicies el tiempo intentando establecer que hay algo importante que tienes que decirnos, simplemente dilo. Aquí el tema es la eficiencia. Estamos interesados en escuchar los puntos centrales, porque queremos ir directamente a la acción.

6. Odiamos tener que esperar

Nosotros no odiamos esperar en la sala de una clínica porque creamos que estamos bien. Simplemente nos gusta ser eficientes con nuestro tiempo y no nos gusta que las cosas se hagan despacio. Cada minuto que pasa es un minuto que perdemos y que podría haber sido usado en algo productivo. Es un minuto que nunca volverá.

7. Somos perfeccionistas

Para nosotros las cosas no son “suficientemente buenas”, “regulares” ni “aceptables” Eso no es parte de nuestro vocabulario. Para nosotros las cosas están bien hechas o simplemente mal hechas. No importa que sea lo que estemos haciendo; siempre nos cuidamos de caer en la mediocridad.

8. Estamos en la “Multi-tarea”

No somos rudos, pero tampoco aburridos. Medimos el valor de nuestros días por las cosas que hacemos y por supuesto logramos más cuando hacemos dos (o más) cosas a la vez.

9. Nos cuesta un poco relajarnos

Para nosotros ‘relajarnos’ no es un objetivo medible. Es difícil para nosotros sentarnos y simplemente “ser”. En vez de eso decidimos en convertirnos en aquello que nuestros sueños demandan. Cualquier cosa más es tiempo perdido.

10. Tenemos un sentido no realista de la urgencia

Desde nuestra perspectiva El Presente es lo único que existe. No tiene sentido dejar una tarea para más adelante, aun cuando a veces esto pueda ser algo bueno. Incluso tendemos a dar a las cosas triviales un mayor sentido de urgencia de las que estas merecen.

11. Tenemos un horario

Nuestro tiempo está cuidadosamente planeado para que podamos lograr las cosas que nos hemos propuesto. En este sentido “Después” y “Más adelante” no forman parte de nuestro vocabulario. Todo está programado y encasillado en una lista. Por supuesto obtenemos una gran satisfacción en tachar las casillas de la lista de las cosas que ya han sido logradas.

12. Somos incansables

Nuestro motor siempre está en movimiento, de manera que cuando tenemos que ralentizar, el exceso de energía se manifiesta en hábitos nerviosos como chuparnos los dedos. Tranquilos, no nos hemos vuelto locos, este es nuestro comportamiento normal.

Resumiendo

Sabemos que todo esto puede ser duro para algunos, pero nosotros somos incluso más duros con nosotros mismos. Esto puede ser difícil porque nadie está privado del perfeccionista que está molestando y sonando en cada movimiento dentro de nuestras cabezas. Simplemente sepan algo: Nos importa- y nos importa mucho, y sentimos mucho si nuestra personalidad es algo que a veces se vuelva difícil de llevar.

Una versión de este artículo fue publicada en TalentSmart.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Abrir

Close