La vieja pregunta de cualquier padre para sus hijos: ¿cuántas horas de sueño necesitan los niños?

¿Lo has preguntado tú mismo o te han dado una amplia gama de respuestas que te dejaron más confundido que antes? El sueño es vital; No solo para la salud, sino también por el impacto que la calidad y duración tienen en nuestra capacidad para movernos por la vida diaria con energía y claridad.

Cuando se trata de niños en crecimiento, es aún más importante saber cuánto deben dormir para estar bien. Los menores se desarrollan mucho durante el sueño, especialmente los bebés, y dado que la rutina diaria de un infante es increíblemente activa, aprendiendo sobre el mundo de una manera intensa, el descanso para ellos es necesario para moverse productivamente a lo largo del día.

El crecimiento energético y las necesidades de aprendizaje de cada niño de cualquier edad varían considerablemente. Desde bebés y niños pequeños, hasta edades tempranas y medias, hasta adolescentes tardíos, la cantidad de sueño necesaria para cada rango de edad es diferente.

Uno de los mayores cambios que ocurren durante el sueño es que nuestro cuerpo sufre una gran transformación. Hablando con los expertos en composición corporal, dicen que nuestras células se están reponiendo y reconstruyendo mientras dormimos, nuestros órganos internos están haciendo su trabajo para metabolizar la energía, desintoxicar y absorber lo que hemos comido y cómo nos hemos movido durante el día.

Más allá de esto, los niños experimentan un nivel completamente diferente de transformación del cuerpo a medida que crecen literalmente nuevos tejidos y fibras musculares, sus huesos están cambiando y formándose, y sus cerebros evolucionan durante estos períodos de descanso. Cualquiera que haya visto crecer a un bebé sabe que cada día se ven un poco diferentes, ¡la transformación de su cuerpo es muy rápida!

Veamos las diferentes etapas de desarrollo y la cantidad de sueño recomendada por los expertos. Según la Academia Americana de Medicina del Sueño (AASM) y la Clínica del Sueño de Millpond Children, las diferentes etapas del desarrollo infantil requieren la siguiente cantidad de tiempo de sueño en el espacio de 24 horas.

Recién nacidos

Todos sabemos que los bebés duermen la mayor parte del tiempo. ¿Pero por qué?

Dado que son recién nacidos, no han formado su propio reloj biológico, o ritmo circadiano, para señalar cuándo es de noche y de día. A continuación se detallan las horas de sueño recomendadas para los recién nacidos:

1 semana: 16-17 horas.

1-4 meses: 14-16 horas.

No es recomendado que duerman menos de 11 horas porque puede ser perjudicial para el crecimiento y desarrollo de un recién nacido.

Infantes

Esto es cuando los bebés pueden dormir por períodos más largos de tiempo, en lugar de despertarse constantemente. Aunque cualquier padre sabrá que los ritmos generales de sueño no serán los mismos para todos los bebés. A continuación se presentan las horas recomendadas para cada uno:

4-12 meses: 12-16 horas, con siestas muy regulares.

En este período no se recomienda: dormir menos de 10 horas porque puede ser perjudicial para el crecimiento y desarrollo de los bebés.

Niños pequeños y preescolares

En esta etapa, los niños se están volviendo más activos, lo que significa que el horario para dormir es aún más importante. Este es un momento de gran aprendizaje, con hablar e interactuar de una manera más social, necesitan tener suficientes horas de descanso, con largos períodos de sueño por la noche y 2 siestas en el día, para obtener suficiente restauración y poder ser productivos en esta fase de la vida.

A continuación se detallan las horas de sueño recomendadas para los niños pequeños y preescolares:

1-2 años: 12-14 horas

No se recomienda dormir menos de 10 horas o más de 16 horas porque puede ser perjudicial para el crecimiento y desarrollo de los niños pequeños.

3-5 años: 11-13 horas

No es recomendado dormir menos de 9 horas o más de 14 horas ya que puede ser perjudicial para el crecimiento y desarrollo de los niños en edad preescolar.

Estudiantes de grado

Es probable que comiencen a negociar un poco para mantenerse despiertos por un espacio de tiempo más tarde a medida que crecen, aunque todavía es esencial darle a tu hijo un horario de sueño consistente y suficiente. A continuación se presentan las horas recomendadas de sueño para los niños estudiantes de primaria:

6-12 años: 9-12 horas

No se recomienda dormir menos de 8 horas porque puede afectar la calidad de la productividad y el aprendizaje de los alumnos de grado.

Adolescentes y adultos jóvenes

A esta edad, los niños todavía están creciendo y desarrollándose, especialmente los adultos jóvenes varones, incluso hasta los 25 años de edad. A medida que se encuentran en esta etapa, también están todavía en una escuela bastante intensiva, por lo que no debes subestimar sus necesidades de sueño. A continuación se detallan las horas de descanso recomendadas para los adolescentes y adultos jóvenes:

13-18 años: 8-10 horas

No se recomienda dormir menos de las 7 horas porque podría afectar la calidad de la productividad y el aprendizaje de un adolescente.

Jóvenes 18-25 años: 8-9 horas.

No es recomendado que duerman menos de 6 horas porque se podría ver afectada la calidad de la productividad y el aprendizaje de los adultos jóvenes.

Hábitos de sueño saludables para ti y tus hijos

Dado que los adultos que trabajan generalmente tienen un promedio de cinco a seis horas de sueño, estas cifras pueden parecer sorprendentes. Los niños realmente prosperan cuando tienen un ritual regular para dormir y un horario de sueño, y aunque podemos sobrevivir el día sin descansar lo suficiente, en el caso de nuestros niños, esto afecta su capacidad para aprender e interactuar.

Además, podemos pensar que estamos bien si dormimos poco, pero ¿cuánto café has consumido antes de sentirte listo y con energía? ¿O con qué frecuencia te despiertas y deseas tener más tiempo para dormir?

La Academia Americana de Pediatría (AAP) ofrece algunos hábitos saludables para un ritual de sueño efectivo:

Establece un ejemplo

Tus hijos aprenden constantemente de tus acciones. Se su modelo a seguir y muéstrales buenos hábitos a la hora de acostarte y levantarte en la mañana.

Preguntar cómo durmieron cuando han despertado también es una buena manera de expresar qué tan importante es el sueño, y que dormir bien es algo bueno.

Mantén una rutina regular

Esto se aplica para despertar, comer, dormir la siesta, jugar y ver la televisión. Tu hijo se sentirá relajado y cómodo con una rutina consistente a la hora de acostarse donde sabrán qué esperar. Especialmente cuando llega el momento de ir a descansar, has la misma rutina, ya sea un baño, un cuento o un momento familiar.

Trata de mantener los mismos tiempos de sueño y vigilia tanto como sea posible.

Mantente activo con tu hijo

A lo largo del día, ayúdales a usar toda su energía delimitadora al estar activo con tus hijos.

Juega afuera, sal a caminar, mantente variado y lo más importante, ¡diviértete! Esto también ayudará a quemar su energía juvenil para que estén listos para dormir cuando sea el momento.

Tiempo de pantalla estricto

Limita el tiempo de exposición a una pantalla

Incluyendo computadoras, televisores, aparatos portátiles, tabletas y teléfonos en la habitación de los niños en todo momento, si es posible, o al menos, por la noche.

De esta manera, la exposición a la luz azul (que crea una respuesta corporal despierta y energizada) no interrumpirá su sueño. Apaga todas las pantallas al menos una hora antes de ir a dormir.

Déjalos tener esos 5 minutos extra de sueño

¿Alguna vez te sientes frustrado con la cantidad de tiempo que tu hijo adolescente pasa en la cama? Tal vez la palabra ‘perezoso’ ha cruzado por nuestra mente o labios. Los adolescentes de la escuela secundaria todavía necesitan dormir mucho.

En general, su uso de energía es muy alto física y mentalmente especialmente en sus horarios escolares, sociales y de actividad, y aún están creciendo. Debes saber que necesitan dormir más que tú, y podría ayudarles a relajarse un poco sobre su dificultad para despertarse o su amor por dormir.

Sé consciente de sus actividades fuera de la escuela

Como padre, es tu trabajo estar consciente de cuán activos son tus hijos, especialmente con los deportes de la tarde y la noche, las clases y las fechas de juego.

Demasiada actividad puede representar un desafío para su sueño si no se gasta suficiente tiempo al final del día.

Conclusión

Los niños de diferentes edades tienen diversas necesidades, por lo que es posible que no necesiten las mismas horas de sueño a medida que crecen.

Pero no importa cuánto tiempo necesiten dormir, lo que es importante es seguir llevando una rutina regular tanto para los niños como para los padres. Los niños aprenden de sus padres y si ellos no duermen sino hasta altas horas de la noche, sus hijos también se quedarán hasta tarde porque simplemente admiran a sus padres.

Vía | Life Hack

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Abrir

Close